domingo, 18 de julio de 2010

MEDIO DE CULTIVO

En microbiología un cultivo es un método para la multiplicación de microorganismos, tales como bacterias , hongos y parasitos en el que se prepara un medio óptimo para favorecer el proceso deseado. Un cultivo es empleado como un método fundamental para el estudio de las bacterias y otros microorganismos que causan enfermedades en medicina humana y veterinaria.

Un microorganismo se puede sembrar en un medio líquido o en la superficie de un medio sólido de agar. Los medios de cultivo contienen distintos nutrientes que van, desde azúcares simples hasta sustancias complejas como la sangre o el extracto de caldo de carne.

Para aislar o purificar una especie bacteriana a partir de una muestra formada por muchos tipos de bacterias, se siembra en un medio de cultivo sólido donde las células que se multiplican no cambian de localización; tras muchos ciclos reproductivos, cada bacteria individual genera por escisión binaria una colonia macroscópica compuesta por decenas de millones de células similares a la original. Si esta colonia individual se siembra a su vez en un nuevo medio crecerá como cultivo puro de un solo tipo de bacteria.

La principal diferencia entre un medio de cultivo sólido y uno líquido es que el medio de cultivo sólido contiene un 1,5-2% de agar-agar, mientras que el medio líquido no contiene agar-agar.

Muchas especies bacterianas son tan parecidas morfológicamente que es imposible diferenciarlas sólo con el uso del microscopio. En este caso, para identificar cada tipo de bacteria, se estudian sus características bioquímicas sembrándolas en medios de cultivo especiales.

Condiciones requeridas:
Los medios de cultivo, para poder ser utilizados y garantizar que los resultados obtenidos a partir de ellos sean confiables, deben cumplir con los siguientes requisitos:
Disponibilidad de nutrientes.
Consistencia adecuada del medio.
Presencia o ausencia de oxígeno y otros gases.
Condiciones adecuadas de humedad (mantener en frigorífico).
Luz ambiental.
pH adecuado.
Temperatura.
Esterilidad.

TPT "Tiempo parcial de tromboplastina"

Es una prueba de sangre que examina el tiempo que le toma a la sangre coagularse y puede ayudar a establecer si uno tiene problemas de sangrado o de coagulación.

Razones por las que se realiza el examen:
El médico puede ordenar este examen si usted tiene problemas de sangrado o coagulación de la sangre. Cuando uno sangra, el cuerpo inicia una serie de actividades que ayudan a que la sangre se coagule, lo cual se denomina cascada de la coagulación. Hay tres rutas para este evento y el examen de TPT examina proteínas especiales, llamadas factores, que se encuentran en dos de estas rutas.

El examen igualmente se puede utilizar para vigilar pacientes que estén tomando heparina, un anticoagulante.

Este examen generalmente se hace junto con otros exámenes, como un examen de protrombina "TP"

Valores normales:
El valor normal varía entre laboratorios. En general, la coagulación debe ocurrir entre 25 a 35 segundos. Si la persona está tomando anticoagulantes, la coagulación tarda hasta 2 ½ veces más tiempo.

Un resultado de TPT anormal (demasiado prolongado) puede deberse a:
Cirrosis
Coagulación intravascular diseminada (CID)
Deficiencia del factor XII
Hemofilia A
Hemofilia B
Hipofibrinogenemia
Anticoagulantes lúpicos
Malabsorción
Deficiencia de vitamina K
Enfermedad de von Willebrand

NOTA: Las muestras de TP y TPT se toman en tubo azul

TP "Tiempo de protrombina"

Es un examen de sangre que mide el tiempo que tarda la porción líquida de la sangre (plasma) en coagularse.

Razones por las que se realiza el examen:
El médico puede ordenar este examen si usted tiene signos de un trastorno de coagulación de la sangre.

Cuando uno sangra, el cuerpo inicia una serie de actividades que ayudan a que la sangre se coagule, lo cual se denomina cascada de la coagulación. La prueba de TP examina proteínas especiales, llamadas factores de coagulación, que están involucradas en este evento, y mide su capacidad para ayudar a coagular la sangre.

Este examen mide:
Factor I (fibrinógeno)
Factor II (protrombina)
Factor V
Factor VII
Factor X

Valores normales:
El rango normal es de 11 a 13.5 segundos. El tiempo de protrombina será más prolongado en personas que toman anticoagulantes.

Nota: los rangos de los valores normales pueden variar ligeramente entre diferentes laboratorios y los controles que se usen.

El aumento en el tiempo de protrombina (TP) puede deberse a:
Obstrucción de las vías biliares
Cirrosis
Coagulación intravascular diseminada
Hepatitis
Enfermedad hepática
Malabsorción
Deficiencia de vitamina K
Terapia con Coumadin (warfarina)
Deficiencia del factor VII
Deficiencia del factor X
Deficiencia del factor II (protrombina)
Deficiencia del factor V
Deficiencia del factor I (fibrinógeno)

sábado, 10 de julio de 2010

RETICULOCITOS

Los reticulocitos son globulos rojos que no han alcanzado su total madurez. Los mismos se encuentran en niveles elevados en el plasma sanguineo por causa de algunas anemias cuando el organismo incrementa la producción de glóbulos rojos y los envía al torrente sanguíneo antes de que sean maduros.

Maduracion:
El reticulocito tiene una vida media de dos días en médula ósea, de allí sale a la circulación donde requiere un día para convertirse en célula roja madura. Durante este período sintetiza el 20% de la hemoglobina contenida en la célula roja.

Patología del reticulocito:
El reticulocito puede mostrar alteraciones en el tamaño. Dependiendo del grado de estimulación se pueden presentar los siguientes eventos:
* Incremento del número de reticulocitos en sangre periférica, normales y aumentados de tamaño, a expensas del pool medular. Esto implica una disminución de la permanencia de estas células en médula ósea.
* Presentación en circulación de reticulocitos que pueden alcanzar dos veces el tamaño normal, como resultado de la expulsión del núcleo del eritroblasto policromatófilo, saltándose el estadio de eritroblasto ortocromático.

Utilidad:
La determinación de los reticulocitos permite evaluar la producción eficaz de células rojas por la médula ósea. Su utilidad real es conocer la capacidad de respuesta de la médula en aquellos casos en los cuales hay disminución de las células rojas en sangre periférica y es necesario que la médula aumente su producción para así compensar el déficit de dichas células. Esta información es de fundamental importancia en el diagnóstico de anemias por falla en la producción que se le llama anemia aplástica y por aumento en la destrucción se llama anemia hemolitica.